El gobernador republicano del estado de Texas, Greg Abbott, promulgó un proyecto de ley que permite que las fuerzas del orden público locales puedan arrestar a inmigrantes y solicitantes de asilo y acusarlos de un delito estatal por cruzar la frontera entre Estados Unidos y México por fuera de los pasos fronterizos oficiales.
El nuevo delito se castigará con hasta seis meses de cárcel, mientras que los jueces de Texas tendrán autoridad para retirar los cargos si un migrante “acepta” ser deportado a México. El gobernador Abbott habló el lunes desde una sección del muro fronterizo del Valle del Río Grande, donde también firmó otros dos proyectos de ley que tienen como objetivo que se militarice aún más la frontera entre Estados Unidos y México.
Gobernador Greg Abbot: “La meta de la ley SB4 es detener la oleada de ingresos ilegales de extranjeros a Texas. Esta ley crea el delito penal de ingresar ilegalmente a Texas desde un país extranjero. […] La ley SB4 permite que se destinen 1.540 millones de dólares para la construcción de más barreras y muros fronterizos como los que tenemos aquí.
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